Queridos:
Qué buena definición de la escritura de Eloy Tizón la que hace Luis María Vieito: «Es generoso el autor en imágenes de indeleble hermosura, uno no sabe donde mirar, porque cada fragmento que pasa ante nuestros ojos nos sorprende más que el anterior, si es que ésto es acaso posible».
Lo dice a propósito de la lectura de Velocidad de los jardines que hace en su blog, «Crónicas de Broceliande», y que podéis leer en este enlace.
Abrazos,
Juan